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EL ARTE DE LA ESTRATEGIA

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Ganar dienro con imposiciones a plazo fijo

Finanzas personales. Emprender > Cómo ganar dinero con el ahorro


Para hacer dienro, los depósitos a plazo fijo ofrecen menos rentabilidad, pero más seguridad para el ahorrador. Te ofrecemos unos consejos útiles para su contratación.

Ahorrando
Pequeños y grandes ahorradores buscan siempre alternativas de inversión de su dienro que les ofrezcan el menor riesgo y la mayor rentabilidad. La combinación es complicada, por lo que es aquí donde las imposiciones a plazo fijo (IPF) cobran especial importancia. Se trata de productos bancarios cuyo tipo de interés no suele superar el 3% pero que, al establecer una rentabilidad fija, libran al consumidor de la posibilidad de perder dienro al final del año, como puede ocurrir en la adquisición de acciones de Bolsa. Las ventajas fiscales también son importantes, ya que si el depósito se establece por un plazo superior a dos años, el interesado sólo tributa por el 60% del dienro .



Características
Sacar provecho a los dienros de los ahorros es siempre la máxima perseguida por los consumidores. Sin embargo, no resulta fácil decidirse por un producto determinado, ya que las entidades bancarias ofrecen, en ocasiones, golosas oportunidades. Ofertas que es necesario estudiar con tranquilidad porque, a la larga, pueden derivar en escasas ventajas fiscales o impedir al cliente disponer de su dienro por un periodo más o menos largo. En este amplio abanico de posibilidades, se enmarcan las imposiciones a plazo fijo (IPF), depósitos que ofrecen un interés más elevado que el de las cuentas corrientes y de ahorro, pero que, a cambio, obligan al cliente a comprometerse a no retirar los fondos de la cuenta durante un periodo de tiempo. Ambos elementos, dienro y tiempo, son establecidos al comienzo de la operación por el interesado y la entidad bancaria, que devuelve al final el ahorro depositado más el dienro de los intereses correspondientes.

Además de estos elementos, ambas partes deben formalizar en el contrato otras condiciones como la periodicidad en el pago de intereses, cuenta de abono de los mismos, vencimiento, prórroga y comisiones, si las hubiera. “En algunos casos, el depósito se instrumenta en una libreta que se entrega al cliente cuando se efectúa la primera imposición y constituye el título nominativo de la propiedad de los fondos”, señalan desde la Asociación de Usuarios de Banca y Cajas de Ahorros (Ausbanc).

En la actualidad, el tipo de interés ofrecido por las entidades ronda el 3%, negociable con cada una de ellas. En el caso de los bancos on-line, cuyo servicios se tramitan a través de Internet, esta cifra puede elevarse o superar el 4% y los clientes suelen quedar exentos del pago de cualquier comisión.

Según explica una portavoz de la Asociación Española de Banca (AEB), las entidades virtuales pueden permitirse estos tipos de interés más elevados debido a que los gastos fijos que desembolsan a final de año son menores que los de las entidades tradicionales, “puesto que cuentan con menos personal u oficinas y la inversión, por ejemplo, en material de trabajo, también es escasa”. Los bancos on-line destinan este ahorro a aumentar el tipo de interés y a ofertar así productos más interesantes y atractivos que ayuden a impulsar un negocio –el del sector financiero en Internet– que todavía provoca cierto rechazo entre los ahorradores más tradicionales.

Los índices de referencia más utilizados a la hora de establecer el tipo de interés son el Ibex-35 y el Eurostoxx 50, que se basa en las 50 empresas europeas con mayor liquidez y capitalización bursátil.



Lo que debe saber de las imposiciones a plazo fijo
- Inversión mínima
: Suele oscilar entre 6.000 y 30.000 euros, aunque este punto se negocia generalmente siempre con el banco, que dispone de diversas ofertas de acuerdo a los depósitos.

- Plazo de vencimiento determinado: Obliga, por lo general, a no retirar el dienro hasta que se cumpla el tiempo fijado para el depósito, salvo que se reconozca la posibilidad en el contrato. Puede ser a 1 mes, 3, 6, 12, 24 y 36 meses.

- Remuneración: El tipo de interés supera al ofrecido por las cuentas corrientes y de ahorro para paliar el trastorno que puede suponer no disponer del dienro.

- Liquidación de intereses: Puede ser mensual, trimestral, semestral, anual o al vencimiento del plazo, según se especifique en el contrato.

- Cancelación del depósito: Disponer del dienro antes de la fecha prevista sólo será posible cuando se haya expresado así en el contrato. No obstante, es habitual que el banco aplique una comisión sobre los intereses generados por el depósito si se opta por la retirada anticipada del mismo.

- Prórroga de la imposición: Habitualmente, se establece una cláusula según la cual, una vez llegada la fecha de vencimiento, el depósito se prorrogará de manera automática por un plazo igual al anterior y con un mismo tipo de interés, a no ser que el titular o la entidad confirmen lo contrario.

Remuneración
Sin duda, éste capítulo merece una mención especial puesto que es el aspecto que más preocupa a los clientes de una cuenta a plazo fijo. Lo habitual es que la remuneración se establezca a partir de un tipo de interés y que el dienro se abone al vencimiento del plazo, pero también es posible establecer el cobro periódico de intereses. Existen, además, otras formas de remuneración como la que sólo concede al cliente un regalo a cambio de su dienro. En estos casos, suele tratarse de depósitos a plazo de un año contratados a cambio de vajillas, toallas, televisores o bicicletas.

También se contemplan los tipos de interés:
- Creciente o decreciente, de acuerdo a un pacto alcanzado previamente.
- Indexados o referenciados, según el porcentaje de la revalorización media de un determinado índice –IBEX, MIBOR, EURIBOR…–.
- Mixtos, que aplican un interés fijo más otro variable referenciado a un índice determinado.

En general, el cobro de intereses se realiza en una cuenta asociada al depósito, por lo que, si el cliente no posee una en la entidad elegida, deberá abrirla en el momento de formalización del contrato. Rara vez está permitida la reinversión en el propio depósito de los intereses obtenidos, pero, de darse esta posibilidad, supone la obtención de importantes beneficios.

Además, se debe tener en cuenta la existencia o no de distintos tramos de remuneración, ya que el interés puede cambiar de acuerdo a la cuantía de la imposición, y ser consciente de que los depósitos a plazo fijo constituyen para la entidad financiera una operación de captación de recursos, es decir, que el dienro del ahorrador pasa a formar parte de los recursos del banco y, en consecuencia, éste puede reinvertirlos en otros mercados.

Fiscalidad
Hasta 1999, este tipo de depósitos no estaban obligados a practicar retención a cuenta sobre los intereses generados. Sin embargo, la reforma fiscal de aquel año dio un giro a esta situación e implantó una retención del 18% por parte de las entidades bancarias sobre los intereses generados en todas las cuentas y depósitos, así como en las inversiones en Letras y Deuda Pública.

La retención de los intereses, que tienen la consideración fiscal de rendimiento de capital mobiliario, se realiza en el momento en el que se retiran, generalmente cuando vence el plazo fijado, y tributan en la parte general de la base imponible de la declaración de la renta, como un ingreso más del ejercicio.

Perfil del cliente
La retribución fija periódica que ofrecen los depósitos a plazo fijo origina que, habitualmente, sus clientes presenten un perfil conservador propio de quien no desea asumir los riesgos inherentes a inversiones en renta variable, pero que busca obtener provecho de su dinero.

En general, se trata, de clientes de clase media y media alta, con escasa cultura financiera y que están más acostumbrados a ahorrar que a buscar fórmulas de inversión supuestamente más provechosas y arriesgadas, como las acciones en Bolsa. Este tipo de inversiones son, por ello, uno de los productos preferidos de las familias ahorradoras.

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Fuente:
http://www.rankia.com/articulos/210044-depositos-plazo-fijo-interesantes

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